Desastre en el cuatrienio
La victoria del demócrata Joe Biden en las reñidas elecciones del pasado 3 de noviembre cierra en Estados Unidos cuatro años de presidencia del republicano Donald Trump, quien polarizó la nación y trabajó duro, en opinión de expertos, para socavar aún más la poca credibilidad de su país a los ojos del mundo y dañar la cooperación entre naciones.
Es cierto que no empezó ninguna guerra, pero se asomó a numerosos precipicios para crear nuevas grietas y ensanchar otras que llevaban tiempo gestándose en el escenario global.
En este sentido, Trump representa el prototipo de ‘líder problemático’ descrito en un ensayo de Margaret MacMillan, una de las principales autoras en historia de las relaciones internacionales.
Así, el magnate republicano hizo de los eslóganes nacionalistas su seña de identidad y se basó en una concepción formalista y anacrónica de la soberanía, subraya el comentarista español Javier Solana.