
Al mismo tiempo que Joe Biden y su equipo estaban actuando como jueces supremos de las democracias en la Cumbre de las Américas, en Los Ángeles, al otro extremo del país, en Washington, el diputado Bennie Thompson, presidente del Comité Selecto sobre el 6 de enero, declaraba en la primera audiencia pública sobre la investigación del intento de golpe de Estado impulsado por Trump que “el mundo está observando qué hacemos aquí (…) Estados Unidos ha sido un faro de esperanza y libertad, un modelo para otros (…) ¿Cómo podemos jugar ese papel cuando nuestra casa está en tal desorden?”