
POR : LIC. SHEILA NODA ALONSO
Un estudio desarrollado en el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí (IPK) para medir el impacto de la infección por SARS-CoV-2 evidenció que las secuelas neurológicas son las que con mayor frecuencia se manifiestan en los convalecientes de la COVID-19 egresados de la institución.
El doctor Narciso Argelio Jiménez Pérez, al frente del proyecto de investigación, explicó que muchas personas después de recuperadas manifiestan trastorno del sueño, adaptación, nerviosismo, ansiedad, depresión, además de fatiga crónica, la afectación más común de todas.
Esta fatiga se diferencia de la provocada por las arbovirosis –virus transmitidos por insectos– al producirse en un mayor número de personas y perdurar por más tiempo; por lo general quienes padecieron dengue solo requieren de una consulta después de recibir el alta médica, mientras que los pacientes COVID-19 mantienen el seguimiento durante meses.