Fondo Monetario Internacional (FMI) al servicio del neolonialismo. Foto: Stock.
Hubo un tiempo en el que las “recomendaciones” del FMI sobre como reorganizar la economía eran leídas, defendidas y ejecutadas como si tratara de un mandato divino. Eran los años 90s del siglo pasado cuando cada estudio del curso de la economía mundial o convenio alcanzado con tal o cual país, no solo emanaba un enjundioso optimismo histórico con lo que se estaba proponiendo, sino que, además, venia acompañada de una apodíctica y eficiente difusión piradimidal que iba de ministros de economía, a parlamentarios; de asesores económicos de gobiernos; a reconocidos empresarios locales; de prestigiosas universidades a comentaristas de televisión y periódicos; de académicos a tertulianos de café, que se relamían los labios con cada frase, con cada dato, con cada sugerencia de este organismo internacional.
Ya nadie habla de capitalismo. Capitalismo implica capital, que posee otro y tú no tienes.Capitalista es dueño, patrono, tipo que impone hacer lo que a él le da la gana. Ahora se habla del mercado. Mercado suena impersonal, como el destino o las leyes naturales. Quien dice mercado casi dice supermercado, tan abarrotado de bienes que casi olvidamos que hay que pagar la factura. Capital es la mano que aprieta. Mercado es la mano invisible que, como Dios, se ocupa de hacer el bien aunque el resultado sea que todo anda mal.
No han pasado unos días apenas de la VII Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños –en el que la unidad de la región fue estandarte predominante–, y del anuncio de Brasil y Argentina de impulsar el comercio bilateral con sus monedas respectivas –camino hacia una moneda común–, cuando Estados Unidos anuncia oficialmente que impulsará una Asociación de las Américas para la Prosperidad Económica.
Con el tufo precedente de la sepultada Área de Libre Comercio para las Américas (ALCA) de Bush, o la nunca implementada Alianza Igualitaria de Obama, la Administración Biden-Harris, con el apoyo de Canadá, proclama ahora este nuevo intento de asociación con los países latinoamericanos y caribeños, esbozado en la pasada Cumbre de las Américas en Los Ángeles, marcada por las exclusiones y los desencuentros.
Estados Unidos está atrapado entre su identidad como “país de inmigrantes” y país envenenado con xenofobia y racismo históricos que han sido elevados a niveles alarmantes por fuerzas neofascistas en los últimos años. En imagen de hace unos días, un migrante latino durmiendo en las calles de Los Ángeles. Foto Ap.
Hay un número sin precedente de peregrinos en el mundo –refugiados, migrantes, exiliados– que se han visto obligados a despedirse de sus hogares, de sus familias, de sus amados, de sus mundos, para ir a buscar posada, muchos en países que comparten responsabilidad en provocar el éxodo a través de políticas económicas, guerras, su contribución al cambio climático y más.
Discurso pronunciado por Miguel Díaz-Canel Bermúdez, primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y presidente de la República, en la VIII Cumbre Caricom-Cuba, celebrada en Barbados, el 6 de diciembre de 2022.
(Versiones Taquigráficas – Presidencia de la República)
Semanas atrás la Casa Blanca dio a conocer su largamente esperado documento sobre la Estrategia de Seguridad Nacional 2022 (ESS) que habría de guiar la política exterior de la Administración Biden.
Esta clase de informes se tornaron obligatorios desde 1987 a los efectos de comunicar al Congreso la visión del Poder Ejecutivo sobre los problemas que menoscaban la seguridad nacional del país. La ESS debe explicitar los cambiantes desafíos que el escenario internacional plantea a Estados Unidos –tema especialmente relevante en el contexto del actual derrumbe del orden mundial de posguerra– y los recursos con que se cuenta para enfrentarlos.
En los últimos años se ha retomado en Cuba con insistencia a nivel social la utilización de los términos Ciencia, Tecnología e Innovación (CTI). Existen indicaciones claras de Gobierno al respecto y todos los organismos de la Administración Central del Estado, empresas, administraciones locales y otras dependencias manejan en sus planes estas tres categorías, aunque en muchos casos sea más por disciplina, que por comprensión.
Según El Toque, es decir, la NED (Fundación Nacional para la Democracia) —quien tenga dudas de la relación vaya al sitio Espacio Público—, ellos calculan la tasa de cambio informal en base a datos confiables. Subrayo la palabra confiable, y acudo al diccionario. Confianza: “Esperanza firme que se tiene en algo o en alguien”; “familiaridad o libertad excesiva”; “pacto o convenio hecho oculta y reservadamente entre dos o más personas, particularmente si son tratantes o del comercio”.
Es muy duro lo que estamos pasando en Cuba, buscar culpables en esa circunstancia es una tentación más que lógica, aunque no siempre justa. Ninguna gestión es perfecta, menos aquella que se realiza bajo una guerra sin cuartel que no solo tiene efectos económicos, sino también políticos y psicológicos, lo que hace que cualquier error multiplique sus consecuencias.
Justificarse con ello tampoco es una opción, no debe tener sentido para quienes sabemos cómo nuestro pueblo, guiado por Fidel, enfrentó y venció las más difíciles circunstancias. La única opción posible es exponer la verdad ante ese pueblo invencible, como se está haciendo, creo yo.
Sin embargo, cuando veo un cubano residente en esta isla preguntando en rol de fiscal cibernético por qué no reparamos las termoeléctricas en el 2021, me miro, me veo y toco, aún vivo al igual que él, busco la tasa de letalidad por Covid aquí y compruebo que es la mitad de la del resto de los países de América, y recuerdo entonces que sin ingresos por turismo y remesas, con todas las fuentes de divisas coartadas por el genocida de Trump y su continuador Biden, Cuba gastó el dinero que tenía y el que no tenía para hacer que él, yo, y nuestros familiares y amigos, tuviéramos el doble de probabilidad de sobrevivir a la pandemia que cualquier habitante de otra nación en este continente, preservando empleos y salarios, lo que generó un enorme déficit fiscal que hay que resolver con urgencia, como hay que solucionar los efectos indeseados de un ordenamiento que hoy se reconoce tuvo errores de diseño .
Y quienes son felices porque alguien dice lo que ellos quieren escuchar nos negaron en ese mismo año 2021 hasta el oxígeno y ofrecieron vacunas cuando ya estábamos vacunados como el que más, y aunque todo eso no nos costó un centavo a ese alguien o a mí, a esa economía cercada que no pudo reparar las termoeléctricas a tiempo sí le costó, aunque eso sea invisible.
Y sí, comparto mi luz y mi apagón con él, como compartiré el destino de las bombas con los “opositores” que creen los misiles vienen con dirección, número de carnet de identidad y un cartel bien grande que dirá “solo para comunistas”, si algún día, gracias a opiniones como la suya los de enfrente se equivocan y nos creen lo suficientemente divididos para no poder defendernos.
Pero si eso no sucede, y gracias a que Facebook no es Cuba y su pueblo no es lo que el imperio paga por ponernos en las pantallas, todo este difícil momento pasa, como ya pasaron otros no menos difíciles, volveré a compartir con él médicos y vacunas, aunque no respeto y afectos, porque, palabra del Maestro: “La pobreza pasa: lo que no pasa es la deshonra”.
A medida que las ciencias avanzan, se distancian unas de otras hasta suponer inalcanzable el ideal de la totalidad. Excepción de esta regla es la estrategia, saber que requiere una de las mayores integraciones de conocimientos para formular conclusiones. No hay estrategia sin examen de la geografía, la sociedad, la economía, la política, las relaciones internacionales y ese universo de conocimientos, representaciones, valores y prácticas que llamamos cultura. En tal sentido, el último libro del general en jefe Vladimir Padrino López, Geopolítica Multipolar: a 20 años del 13-A (Fundación Editorial El Perro y la Rana, Caracas, 2022) es una travesía por las agendas que definen la contemporaneidad, a la vez que manual de supervivencia en ella. Destaquemos algunas.
Díaz-Balart pidió una “votación registrada”después de intervenir para decir mil mentiras y asustar y engañar a todo el mundo simulando hablar en nombre del pueblo de un país que tanto desprecia.
Cuando lees las barbaridades que dicen congresistas como Bob Menéndez, Mraco Rubio, Mario Díaz Balart o Sra. María Elvira o escuchas como mienten sin pudor y doble raseros escandalosos para tratar de engañar a quienes supuestamente representan y justificar las medidas inhumanas contra la población de Cuba, uno recuerda mejor por qué se hizo una Revolución socialista en Cuba.
Primer vuelo promocional Miami-Varadero. Foto: ACN.
El primer vuelo promocional Miami-Varadero, que persigue como fin acortar distancias entre las familias cubanas, arribó la noche última al Aeropuerto Internacional Juan Gualberto Gómez, como parte del restablecimiento de las operaciones aéreas entre provincias y Estados Unidos.