Toda identidad nacional se va construyendo sobre la base de valores y antivalores, de binomios antitéticos que en su contradicción dialéctica van forjando una forma específica de existir en colectivo: revolución y reacción, libertad y opresión, independencia y anexión, solidaridad y egoísmo.
Ellos, que tanto hablan de “lavado de cerebro”, lo tallan y lo lavan de forma tal que privan al ser humano de su mayor tesoro: la capacidad de pensar.
Cuando surgieron, los medios de difusión masiva se apoderaron de las mentes y gobernaban no sólo sobre la base de mentiras, sino de reflejos condicionados. No es lo mismo una mentira que un reflejo condicionado. La mentira afecta el conocimiento; el reflejo condicionado afecta la capacidad de pensar. Y no es lo mismo estar desinformado que haber perdido la capacidad de pensar, porque en tu mente predominen los reflejos: “el socialismo es malo, el socialismo es malo, te quita la patria potestad, te quita la casa, te quita la mujer.” Y todos los ignorantes, todos los analfabetos, todos los pobres, todos los explotados repitiendo: “El socialismo es malo, el socialismo es malo.” Así se enseña a hablar a los loros, a bailar a los osos e inclinarse respetuosos a los leones.
El porrista y amigo de Posada Carriles,, Miguel Saavedra dio el sábado su show anticubano en las afueras del restaurante Versalles. Foto: miamiherald.com
Imaginen que la selección de béisbol de EEUU juega en Cuba y, desde las organizaciones de la Revolución cubana, se organizan protestas en su contra, por ser el “equipo del imperialismo y del bloqueo” contra la Isla. Imaginen que el gobernador de La Habana anima a la población a llenar de carteles el Estadio Latinoamericano, y que la prensa y televisión repiten, sin cesar, que los beisboleros representan a un imperio genocida y asesino, a una plutocracia y a un régimen violador de los derechos humanos.
Quienes pretenden terminar con el sistema socialista de una nación independiente se apoyan en Estados Unidos y su clásica injerencia política. Esa que funciona en otros países, pero no en su vecino ubicado a 90 millas náuticas.
Las comisiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular están generando más noticias que de costumbre. Se anuncian medidas económicas para enfrentar la escasez de divisas y de abastecimientos; se habla de control popular de precios y de la versión definitiva del Código de las Familias que se llevará a referendo en septiembre.
Pero todas estas son noticias verdaderas y lo nuestro es desmontar mentiras. Algunas tan elásticas, que pueden tener más de 3 versiones, cual de las tres más falsas.
Fue lo que ocurrió la semana pasada con los reportes generados desde el sur de la Florida, sobre un incidente que involucró a una mujer con embarazo avanzado, en una cola en la localidad de Managua, en la periferia de La Habana. El incidente, filmado por más de un transeúnte con celulares y viralizado en las redes, muestra claramente cómo la policía ayuda a trasladar a la embarazada que cae de sus propios pies. Primero en brazos de un joven policía y luego dentro de una patrulla, la mujer es atendida a tiempo y tanto ella como el bebé son reportados en buen estado en varios post en Facebook.
No obstante esas evidencias, el hecho fue contado en canales de televisión y en las redes de reconocidos odiadores, como trifulca, abuso policial, protesta y más. Se llega a decir que la mujer perdió la criatura y hasta se acusa a los médicos que la atendieron. Todo un modelo de manipulación y mentira que explicó Bárbara Betancourt, quien definió como algo realmente alucinante la cantidad de videos que se ponen de cualquier tema sobre Cuba, pero sólo si es feo, denigrante, vulgar, violento. El objetivo es difundir la idea de un estado fallido, de un país en crisis material y moral.
En opinión de Reinier Duardo, la actual sobreproducción de mentiras y distorsiones, tiene que ver con el momento que vive el país y los factores que gravitan alrededor.
En el contexto de la compleja situación provocada por el déficit de generación eléctrica, la baja disponibilidad de combustible y el desabastecimiento del mercado interno, el gobierno aprueba medidas que apuntan a una recuperación y se sugiere que podría estar en camino un acercamiento para el diálogo con Estados Unidos -según recientes declaraciones del Papa, aunque sin ninguna confirmación oficial de las partes- , es decir coinciden en el tiempo situaciones que históricamente han sido desencadenantes de las peores acciones de la ultraderecha de origen cubano contra su país de origen.
Duardo recordó el histórico testimonio de Gabriel García Márquez, cuando fue portador de un mensaje de Fidel a Clinton, donde alertaba del riesgo de actos terroristas contra el turismo entre las dos orillas. Uno de los asesores de Clinton habría comentado, al conocer detalles sobre los organizadores de los atentados, que en algunos temas teníamos los mismos enemigos.
Las raíces de esos grupos violentos nunca fueron cortadas. Los enemigos más profundos de la Revolución han buscado siempre, incluso ahora, provocar un incidente para que se frustre cualquier posible avance en la recuperación del país y en las relaciones con Estados Unidos. Para impedirlo, una vez llegaron hasta el magnicidio. Justamente cuando se proponía dialogar con Fidel, asesinaron a John Kennedy.
En el segundo tema de la mañana, el sonido dio cuenta de la reacción, más que grosera y violenta del innombrable y otros de su estilo, ante la muerte de Pupy Pedroso.
Hoy, que se organizan las honras fúnebres de un músico popular que se inscribe entre lo más genial y relevante de la música cubana, lo que se dijo en el canal de Cubanos por el mundo es una nueva afrenta a la cultura cubana. Y el cierre de la infamia volvió a ser la convocatoria a que el pueblo se lance a las calles a provocar un estallido.
Posiblemente jamás se profirieron insultos tan groseros contra una autoridad eclesiástica, como los que se escuchan en los últimos días contra Su Santidad, el Papa Francisco. El líder de la Iglesia Católica tiene rabiando a los odiadores, por haber declarado que ama al pueblo cubano y que tiene una «relación humana con Raúl Castro».
Carros de la policía de Cuba que fueron volcados por los manifestantes en una calle de La Habana. Foto: AFP
Cuando Janett Rodríguez se levantó este domingo, no sabía que más tarde tendría un sentimiento enorme: desconsuelo. Mientras organizaba las tareas de uno de los proyectos de la Universidad Tecnológica de La Habana para mejorar la gestión hospitalaria en instituciones de la capital, no imaginó que luego andaría recorriendo las calles en otro intento por defender lo suyo. Lo nuestro. La Habana, 11 de julio de 2021.
Reinaldo Rosado, profesor de la UCI, víctima de las manifestaciones violentas del pasado domingo. Foto: Abel Padrón Padilla/Cubadebate.
Reinaldo se levantó temprano el domingo, para él hace muchos meses que no hay descanso los fines de semana. Además de ser profesor de programación de la Universidad de las Ciencias Informáticas (UCI), es también encargado de apoyar la logística del lugar convertido en centro de aislamiento con más de 1 200 camas activas para pacientes positivos a la covid-19.
No voy a comentar sobre lo que se ha publicado en los días que sobrevinieron al 11 de julio de 2021. Frente a la mentira, la patraña y el llamado al odio y la violencia del Imperio y sus mercenarios, ha brillado la decisión mayoritaria del pueblo y su presidente de superar escollos, marchar adelante y salvar la Revolución.
Parece que tendremos un verano cargado de fake news. Algunas realmente terroríficas, como la de cierta mujer que comenta (lee) lo que le dijo un «hermano», quien «dice que le dijeron que han dicho» que se acerca el momento de cero combustible, cero comida y estallido social. Más o menos.
Normalmente, un candidato político promete mejoras para la vida de sus electores. Normalmente, un candidato político no amenaza el futuro de sus electores o de los familiares de sus electores. Salvo que ese candidato político, aspire al cargo por el condado de Miami Dade. Como decía el viejo Luis Ortega «Sólo en Miami ocurren ciertas cosas».
Una campaña perversa está en marcha en las redes para desatar otro estallido social en Cuba, usando para ello las necesidades reales y el duro contexto que ha dejado la pandemia en la economía a nivel global y, por supuesto, a nivel nacional, en nuestro caso multiplicado por el bloqueo y sus 243 medidas. El nuevo objetivo son las madres cubanas.