Carlos Lazo: Historia de una pelea entre el odio y el amor. Por Rodolfo Romero Reyes
La historia de Carlos Lazo no empieza en 1965, año de su nacimiento, sino que — como la de toda una generación de cubanos — inició en 1959. Su niñez, su adolescencia, sus decisiones de juventud no pueden entenderse si no se comprende el entramado de contradicciones que se entretejen alrededor de la Revolución Cubana, de los procesos migratorios, del conflicto histórico entre Estados Unidos y la nación caribeña.
Para contarla no bastará nunca la estrechez de una entrevista. Habría que indagar en la vida cotidiana — década de los sesenta y setenta — del reparto Jaimanitas, ubicado en la costa norte habanera, donde nació y creció.
Sería necesario, también, conocer qué impulsó a su hermano a irrumpir en la embajada de Perú en 1980 y solicitar asilo en el país andino; o qué motivó a su madre a viajar a Estados Unidos, establecerse en Miami y desde allí reclamar a sus hijos; o qué ideales tenía aquel padre que prefirió quedarse en Cuba apostando por el futuro del socialismo.
El relato quedaría inconcluso si no mencionamos que, con apenas 23 años, en 1988 hizo su primer y fallido intento de salida ilegal del país; o que concretó su sueño de llegar a Estados Unidos, otra vez en balsa, tres años después, dejando atrás a sus dos pequeños hijos.
De toda esa historia, la más reciente es quizás la más conocida. Sí, porque después que se hiciera viral el video de él y sus alumnos cantando «Cuba, Isla bella», de Orishas, en 2018, su nombre empezó a aparecer con sistematicidad en los medios de comunicación. Cuando semanas después del tornado que trastocó la noche habanera el 27 de enero de 2019, llegó con donativos a la barriada de Lawton, ya no era un desconocido.
Los que estuvimos en noviembre de 2019 en el Teatro «Karl Marx», no imaginábamos que entre los invitados al concierto de Buena Fe estaría Fábrica de Sueños, el proyecto protagonizado por Carlos Lazo y sus alumnos; adolescentes norteamericanos que no solo aprenden español, sino que descubren la música y la cultura cubana gracias al esfuerzo de un profesor que se ha empeñado en construir «Puentes de amor» entre ambas orillas.
Y uno pudiera pensar que, con tantos buenos sentimientos, en un corazón como el suyo no hay espacio para el odio. Sin embargo, cuando al calor de esta entrevista recordamos que no pudo concretar su sueño de estudiar Medicina por los prejuicios políticos que sobre él pesaban y mencionamos el año que estuvo en prisión luego de su primer intento de salida ilegal, descubrimos que durante mucho tiempo el odio se apoderó de él.
«Pasé muchas situaciones desagradables, que en parte fueron fruto de los tiempos que se vivían, de las dinámicas de la sociedad cubana de aquel momento. Y sí, sentí odio. No escapé de esas fuerzas que tiran para un lado con fuerza extrema. Terminé odiando a este país, a este pueblo; no me da pena decirlo porque hoy lo amo con tanto cariño y lo llevo tan dentro, que creo que el peso que puse en el amor, pulverizó hasta el último centímetro de odio».
Cuando llegó a Estados Unidos fue parte de esa herencia anticubana que respira la ultraderecha de la Florida. Sería una sincera y emotiva conversación con su papá, en 1994, la que removería sus pasiones.
«Mi padre me visitó en 1994. En medio de nuestros acalorados debates le dije que estaba a favor de que apretaran las sanciones contra Cuba. Recuerdo su respuesta: “Mijo, tú no puedes ser así, esa es tu familia, esos son tus vecinos”. Lo dijo de la misma manera que me hablaba cuando estaba enseñándome a nadar: “así no, mejor hazlo así”, como cuando me daba un consejo. Y aquello tocó mi conciencia».
Meses después su padre enfermó. Momentos antes de su muerte, Carlos pudo regresar a La Habana por primera vez después de su partida. «Entrar, estar en mi barrio… ya no pude regresar al camino del odio, no pude desearle mal a esa gente que me habían criado, que habían estado conmigo toda la vida, y que me recibieron con tanto cariño. De ahí en adelante aquel odio fue historia pasada. Decidí estar al lado de mi gente, y que la política nunca iba a ser algo que me separara de lo esencial: el amor, la familia».
Después de unos cuantos años viviendo en Miami, y decidido como estaba a sacar de su interior cualquier sentimiento que no fuera de afecto hacia los suyos, decidió mudarse a Seattle. Quería mejorar en lo económico, alcanzar su potencial como ser humano, estudiar y alejarse del odio, según sus propias palabras. Llegó a esta ciudad en 1998. Por esos años allí lo mismo se presentaba el Ballet Nacional de Cuba, que ofrecían un concierto los músicos del Buena Vista Social Club.
«Ocurría allí a teatro lleno, con las personas participando, divirtiéndose, teniendo un momento de alegría sana. Sin embargo, eso no pasaba en Miami. Estar lejos de Cuba, pero al mismo tiempo sentirme cerca culturalmente hablando, fue uno de los atractivos de Seattle. Se vive un ambiente solidario, progresista; son razones por las que fui hasta allí; donde llevo viviendo más de 20 años».
«Traigo oxidado el corazón, me hace falta cuerda,
mi alma necesita transfusión, sangre de mi tierra.
Regreso a la cuna que me vio nacer,
regreso a ese barrio que me vio correr;
lo que fui, lo que soy y seré, por mi isla bella.»
Orishas puso la letra y la música; Carlos Lazo tuvo la iniciativa de cantarla con sus estudiantes; internet y las redes sociales hicieron lo suyo y el video del coro se hizo viral: un profesor cubano-americano se valía de la música para promover sus mensajes.
«Después de que se hiciera viral la canción, y de que viniéramos a La Habana a traer donaciones cuando el tornado, me he visto envuelto de manera más grande en el afán por tender puentes de amor entre nuestros países. Esos fueron los cimientos de lo que ahora hago; la canción fue la punta del iceberg. Desde hacía varios años en mi aula la cultura cubana era una parte esencial del currículum. Antes de eso, ya habíamos visitado Cuba, en un intercambio cultural con niños cubanos, que no fue tan conocido en ese momento».
Iraq también influyó en su activismo político. Sí, porque Carlos se vio enrolado como enfermero en ese conflicto bélico. Al regresar de la guerra, en 2005, no pudo viajar a Cuba a visitar a sus dos hijos porque la Administración Bush había aprobado nuevas restricciones que permitían a los cubanoamericanos visitar la Isla una sola vez cada tres años.
«Regreso y me encuentro que por esas medidas no podía ver a mis dos hijos. Entonces me convertí en una voz de las tantas que pidieron el levantamiento de aquellas sanciones. Incluso, terminé testificando en el senado estadounidense, pidiéndoles a los políticos, al presidente, que levantara las restricciones. Desde ese momento, y en estos últimos casi 20 años he sido lo que soy hoy, solo que, a raíz de la canción en 2018, se ha conocido más mi trabajo. Por eso, a partir de que Donald Trump arreciara las medidas contra la familia cubana, he tenido un rol más público. De cierta forma me he convertido, y me han convertido, para bien o para mal, en una bandera de la gente que lucha por puentes de amor».
Cuenta Lazo que mientras veía un documental de Michael Moore, el año pasado — el cineasta argumentaba cómo ocurrían eventos singulares que hacían que la gente empezara a ver las cosas diferentes, como chispas en la oscuridad que prendían un fuego — , se levantó del sofá y le dijo a sus hijos que correría desde Seattle hasta Washington, unos cinco mil kilómetros — tipo Forrest Gump, me dice — . Después de que sus hijos apuntasen que aquella idea era una locura, decidieron hacer el trayecto en bicicleta.
«Cuando supimos que el presidente Biden, seis meses después de su toma de posesión, aún no levantaría las medidas impuestas por Trump, decidimos hacer algo que llamara la atención de la opinión pública, que nos conectara con el pueblo americano. Teníamos como antecedente la anterior bicicletada, pero esta vez debía que ser algo mucho más dramático. Entonces dije: “Pues vamos a caminar desde la cuna donde radican la mayoría de los cubanos que viven en el exterior hasta Washington DC para llevar el mensaje de que los cubanoamericanos y el pueblo norteamericano quieren que se levanten esas sanciones que pesan sobre Cuba”».
Y llegaron hasta la mismísima Casa Blanca.
«Allí hicimos un acto multitudinario en el que participaron 400 o 500 personas. Fue muy bonito, simbólico. Llevamos con nosotros 27 000 firmas que se entregaron en el Departamento de Estado y que llegaron a la Casa Blanca. Aunque siguen las medidas ahí, fue una acción importante. Seguimos como el pitirre: pinchando, pinchando, pinchando…y tanto va el cántaro a la fuente hasta que se levanten las sanciones; no me cabe duda de que lo vamos a lograr».
Sobre ese tema, Carlos ha conversado con varios congresistas que están a favor de su levantamiento. Sin embargo, califica como un diálogo imposible, y casi inexistente, el que ha intentado sostener con las personas que las apoyan.
«El modus vivendi de algunos de estos congresistas es gracias a las sanciones. Recuerdo que en una ocasión intenté conversar con el senador Ted Cruz. Son personas que están por el odio, por la mano dura, no tienen intención de dialogar. Viven en una industria que gana dinero gracias a la enemistad entre nuestros pueblos, son parte de programas que dedican millones de dólares todos los años a tratar de tumbar al gobierno cubano; todo eso se traduce en dinero para programas federales que termina muchas veces en Miami, y ayuda a la reelección de los políticos. Es un círculo vicioso terrible que hace imposible el cambio de la política hacia Cuba».
Los recientes sucesos del 11 y 12 de julio en la Isla han evidenciado cuán politizada vive parte de la emigración cubana en la Florida. Algunos llegaron a solicitar la intervención militar de Estados Unidos. Para quien fue testigo de los bombardeos en Fallujah, esta solicitud está totalmente fuera de lugar.
«Las personas que solicitaron intervención en Cuba no saben de lo que están hablando. Yo vi las bombas caer, estuve en la guerra, he visto niños muertos en las calles. Es muy fácil, y muy irresponsable, hablar desde un teléfono o desde la comodidad de tu casa, y pedir dolor, hambre, necesidad, y bombas para otros. Cuando uno ha visto la guerra, el desastre que deja en una nación, y en las personas que logran sobrevivir, uno no desea eso para nadie, y menos aún para su pueblo. Hay mucha gente buena que está atrapada en una propaganda de odio. Y los entiendo, porque yo también lo viví, pero también sé que es posible regresar de ahí. Quiero creer que esos cubanos están confundidos en este mundo de posverdad, donde se pone tanta basura en las redes, donde se incita al odio; van a regresar de ahí, de la misma manera en que yo regresé del odio, porque en algún lugar les habita la ternura».
A pesar de este hostil escenario, Carlos Lazo es optimista, piensa que en un futuro podrían disminuir los rencores y la migración sería entendida y asumida desde ambas orillas como un proceso natural, sin tanta carga política de por medio.
«Creo que eventualmente la migración cubana, el pueblo y el gobierno en la Isla se van a entender. Ese es el único camino, 60 años de confrontaciones han probado que eso no lleva a nada provechoso para los pueblos. En el caso de los cubanos que vivimos fuera de Cuba, hay un mar de odio, de desinformación, de propaganda que demoniza al que vive dentro, que llama a la violencia. Eso requiere que existan políticas, lo mismo en Estados Unidos como en Cuba, que beneficien esos contactos y que incentiven las relaciones entre los cubanos de afuera y los cubanos de adentro».
¿Tienes esperanzas de que Biden retome la agenda de intercambio y entendimiento trazada durante la Administración Obama?, le pregunto casi al cierre de nuestro diálogo.
«Si no la tuviera, no estaría haciendo esto. En algún momento van a ser tantas las voces, que Biden va a hacer lo que prometió: retomar la política de Obama hacia Cuba. Sé también que estos son procesos que no se toman un día, ni dos. Recuerdo cuando empezamos nuestra lucha para quitar las medidas que había impuesto Bush en 2004 y que no se quitaron hasta el 2009 cuando llegó Obama, algo que no fue casual, sino fruto del trabajo de muchos activistas que levantaron las voces y protestaron. No sé el tiempo que nos tome, pero sé que al final, el amor, la familia, lo correcto, el sentido común, se van a imponer».
Y así concluimos esta conversación a distancia con un cubanoamericano a quien el optimismo lo lleva a soñar un futuro de colaboración médica, económica, social entre los dos países; no solo como vecinos sino como amigos, basado en un mutuo respeto donde no se viole la soberanía de ninguna nación. «Un pedacito de eso que anhelo, lo vivimos cuando Obama inauguró una nueva política hacia Cuba. Ojalá vuelva a ocurrir. Es un futuro que deseo, no solo para Cuba y Estados Unidos, sino para toda la humanidad. Ese es el futuro por el que vale la pena luchar para nuestros hijos».
La vasta red internacional a cargo de la propaganda de guerra ucraniana. Por: Dan Cohen
Desde que comenzó la ofensiva rusa dentro de Ucrania el 24 de febrero, el ejército ucraniano ha cultivado una imagen de un pequeño ejército valiente que enfrenta al Goliath ruso. Para reforzar la percepción del temple militar ucraniano, Kiev ha producido un flujo constante de sofisticada propaganda dirigida a agitar el apoyo público y oficial de los países occidentales.
La campaña incluye guías lingüísticas, mensajes clave y cientos de afiches propagandísticos, de los cuales algunos contienen imágenes fascistas e incluso elogian a líderes neonazis.
Detrás de la labor de relaciones públicas de Ucrania está un ejército de estrategas de política exterior, lobistas de Washington DC y una red de canales de noticias vinculadas a inteligencia.
La estrategia propagandística de Ucrania obtuvo los elogios de un comandante de la OTAN que dijo al Washington Post: “Son realmente excelentes en comunicación estratégica: medios, operaciones informativas y también operaciones psicológicas”. El Post finalmente admitió que “las autoridades occidentales dicen que aunque no pueden verificar independientemente gran parte de la información que Kiev publica sobre la evolución de la situación en el campo de batalla, incluidas las cifras de bajas de ambos bandos, no obstante representa una estrategia de comunicación muy eficaz”.
La clave de la labor propagandística está en una legión internacional de empresas de relaciones públicas trabajando directamente con el Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania para librar una guerra de información.
Según el sitio de noticias del ramo PRWeek, la iniciativa fue lanzada por un personaje anónimo que supuestamente fundó una empresa de relaciones públicas radicada en Ucrania.
“Desde el primer momento de la guerra, decidimos unirnos al Ministerio de Relaciones Exteriores para ayudarlos a distribuir las fuentes oficiales para mostrar la verdad», dijo el personaje sin nombre a PRWeek. «Esta es una guerra híbrida: la mezcla de lucha sangrienta con una gran campaña de desinformación y falsificación liderada por Rusia [sic]”.
Según el anónimo, más de 150 empresas de relaciones públicas se han unido al blitz (bombardeo) propagandístico.
La iniciativa internacional está encabezada por la cofundadora de la empresa de relaciones públicas PR Network, Nicky Regazzoni, y Francis Ingham, un importante consultor de relaciones públicas con estrechos nexos con el gobierno del Reino Unido. Ingham trabajó previamente con el Partido Conservador británico, forma parte del Consejo de Estrategia y Evaluación del Servicio de Comunicación del Gobierno del Reino Unido, es el director ejecutivo de la Organización Internacional de Consultoría de Comunicación y dirige el órgano de comunicadores afiliados a los gobiernos locales del Reino Unido, LG Comms.
“Hemos tenido el privilegio de ayudar a coordinar los esfuerzos de apoyo al gobierno ucraniano en los últimos días”, dijo Ingham a PRovoke Media. “Las agencias han ofrecido equipos enteros para apoyar a Kiev en la guerra comunicacional. Nuestro apoyo al Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania es inquebrantable y continuará tanto como sea necesario”.
Con un anónimo personaje ucraniano uniéndose a dos importantes figuras de relaciones públicas al blitz propagandístico del gobierno de Kiev, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania distribuyó un dossier (archivado) con materiales instruyendo a las agencias de relaciones públicas sobre “mensajes clave”, lenguaje aprobado, contenido de las construcciones propagandísticas desacreditadas, propaganda de extrema derecha y neonazi.
La carpeta está manejada por Yaroslav Turbil, descrito en su página de LinkedIn como “Director de Ukraine.ua, el ecosistema digital de Ucrania para las comunicaciones globales. Comunicación estratégica y promoción de la marca país”. Turbil ha trabajado en múltiples organizaciones de la “sociedad civil” estrechamente vinculadas con el gobierno de Estados Unidos y fue becario en Internews, una organización vinculada a la inteligencia estadounidense que opera bajo la apariencia de promover la libertad de prensa.
Entre las construcciones propagandísticas distribuidas en el dossier, está un video del incidente en Isla de la Serpiente, que se demostró rápidamente era falso, en la que se reportaba que los guardias fronterizos estacionados en una pequeña isla habían sido asesinados después de decir a un buque de guerra ruso “Jó***se” cuando se acercaba y les pedía que se rindieran. El presidente Zelenski dio una conferencia de prensa anunciando que les concedería a los hombres la medalla Héroe de Ucrania mientras la historia se difundía por los medios dominantes. Sin embargo, los soldados supuestamente muertos aparecieron rápido vivos y sanos, demostrando que su postura heroica era una farsa. A pesar de que se comprobó la falsedad de la historia, el dossier contiene un video propagandístico promocionándola.
Otra carpeta en el dossier está cargo de la artista gráfica ucraniana Dasha Podoltseva, con un Máster en Bellas Artes, y contiene cientos de gráficos propagandísticos presentados por artistas en Europa y Estados Unidos.
Algunos contienen mensajes genéricos de “no a la guerra”, mientras que otras decenas de imágenes celebran al “Fantasma de Kiev”, un heroico piloto ucraniano que resultó ser inexistente, y el falso incidente de “Los 13 de Isla de la Serpiente”.
Muchas usan lenguaje xenófobo y racista, y otras son explícitas en sus elogios a prominentes figuras neonazis ucranianos, incluyendo al líder de C14 Yevhen Karas, el fascista paramilitar Sector Derecho y el neonazi Batallón Azov. Varias imágenes convocan a hacer “batidos banderistas”, referencia a los cocteles molotov llamados así por el difunto comandante de la Organización de Nacionalistas Ucranianos Stepán Bandera, quien colaboró con la Alemania nazi en la matanza colectiva de judíos y polacos étnicos durante la Segunda Guerra Mundial. Otra imagen muestra un libro titulado Enciclopedia de Enfermedades Incurables, mencionando a Rusia, Bielorrusia, Corea del Norte, Siria y Eritrea.Dice: «Servicios rituales».Dice: «Batido de Bandera para los amigos de Putin».
Los extremistas extranjeros van en manada a Ucrania
El dossier también contiene un link a una página del Ministerio de Relaciones Exteriores llamada “Lucha por Ucrania”, que provee instrucciones a extranjeros que desean unirse a las fuerzas armadas de Ucrania infestadas de neonazis, denominadas “Legión de Defensa Internacional de Ucrania”.
Tras el llamamiento de Zelenski para que los combatientes extranjeros formen una brigada, combatientes de todo el mundo, incluidos Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Australia, España, Colombia, Brasil, Chile, entre otros, han viajado para enfrentarse a las fuerzas rusas. Otros sin entrenamiento o experiencia en combate han arribado para hacer “turismo de guerra”, a los que un soldado británico llamó “cazadores de balas”.
Gráficos de contratación del Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania extraídos del dossier.Gráfico de contratación del Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania extraído del dossier.
Mientras el gobierno ucraniano dice que decenas de miles han respondido a la convocatoria, algunos analistas expresaron dudas de esas cifras, llamándolas un “ejercicio de relaciones públicas”.
Sin embargo, los extranjeros que han viajado a Ucrania se han encontrado una realidad mucho más grave que la anticipada.
La fuerza aérea de Rusia bombardea las instalaciones militares adyacentes a donde los combatientes foráneos duermen. Luego de haber huido a la vecina Polonia, un combatiente español describió el bombardeo como un “mensaje” que pudo haber matado a miles.
Asimismo, un combatiente estadounidense que se escondió en una ambulancia para escapar de la primera línea advirtió que las autoridades ucranianas estaban asesinando a los extranjeros que decidían no combatir, calificándolo de trampa.
Términos correctos
Un documento dentro del dossier define el lenguaje aceptado sobre el conflicto con Rusia determinado por el gobierno ucraniano.
“Tales clichés rusos como ‘referéndum de Crimea’ o ‘la voluntad del pueblo de Crimea’ son absolutamente inaceptables”, afirma el documento, en referencia al referéndum de 2014 que tuvo un éxito abrumador para separarse de Ucrania.
El documento considera inaceptables los términos “guerra civil en Dombás”, “conflicto interno”, “conflicto en Ucrania” y “crisis ucraniana” para describir la guerra del ejército ucraniano con las repúblicas secesionistas de la región del Dombás. Esto, a pesar del hecho de que la Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de las Naciones Unidas estima que 14 200 personas, incluyendo 3 404 civiles, han muerto en combate en Ucrania desde 2014.
En lugar de estas frases, el documento pide que se use los términos “agresión armada de la Federación Rusa en Dombás, conflicto armado internacional, guerra rusa contra Ucrania, conflicto armado ruso-ucraniano”.
Mensajes clave
Otro documento titulado “Mensajes clave” contiene alegatos propagandísticos específicos que fueron ampliamente difundidos en los medios occidentales dominantes, pero que desde entonces han sido desmentidos. Una sección afirma que “Europa entera estuvo al borde del desastre nuclear, cuando las tropas rusas comenzaron a bombardear la más grande planta nuclear de Zaporiyia”.
No obstante, el director general de la Agencia Internacional de Energía Atómica, Rafael Mariano Grossi, dijo que el edificio impactado por un “proyectil” ruso en la planta de Zaporiyia “no formaba parte del reactor” sino que era un centro de entrenamiento. Las tropas rusas también dejaron que los trabajadores ucranianos continuaran operando la planta.
Otra sección agradece a Turquía por la decisión de “bloquear el acceso de los buques de guerra rusos al Mar Negro”.
Sin embargo, el presidente turco Recep Tayyip Erdogan cerró los estrechos de Bósforo y Dardanelos a todas las embarcaciones militares, previniendo que los buques de la OTAN y de Rusia accedieran al Mar Negro.
Entre los mensajes clave del documento está una declaración de agradecimiento a las “manifestaciones anti-guerra celebradas por ciudadanos de muchas naciones a través del mundo que demuestran un fuerte apoyo a Ucrania en su defensa contra Rusia”
Se refiere a grandes manifestaciones a favor de Ucrania en Europa que han expuesto solicitudes de zonas de exclusión aérea sobre Ucrania y derribar a la aviación militar rusa, que transformaría potencialmente el conflicto en una guerra mundial entre potencias nucleares.
“A pesar de la propaganda de Rusia, no existe discriminación alguna basada en la raza o la nacionalidad, incluso cuando se trata de cruzar la frontera estatal por ciudadanos extranjeros”, afirma el documento.
No obstante, numerosos videos y noticias han documentado a las autoridades ucranianas impidiendo que africanos escapen del conflicto. Incluso el New York Times, difícilmente un bastión de la propaganda del Kremlin, publicó un reporte documentando estas prácticas racistas.
“A pesar de la propaganda de Rusia, no existe discriminación alguna basada en la raza o la nacionalidad, incluso cuando se trata de cruzar la frontera estatal por ciudadanos extranjeros”, afirma el documento.
No obstante, numerosos videos y noticias han documentado a las autoridades ucranianas impidiendo que africanos escapen del conflicto. Incluso el New York Times, difícilmente un bastión de la propaganda del Kremlin, publicó un reporte documentando estas prácticas racistas.
“If I were a Russian worried about the potential of Nazi extremists coming up with a dirty bomb, I’d need to take control of this very facility” – @realscottritter deconstructs the Ukrainian nuclear plant takeover
Un mensaje dice que “el 16 de marzo, las fuerzas rusas lanzaron una bomba en un teatro donde estaban resguardados 1 300 civiles. El número de víctimas aún se desconoce”.
Pero, como denunció Max Blumenthal, la explosión parece ser el resultado de una operación de bandera falsa diseñada por el neonazi Batallón Azov que buscó desencadenar una intervención de la OTAN.
Granjas de trolls respaldadas por la OTAN
Otra investigación realizada de forma anónima muestra cómo las empresas de relaciones públicas ucranianas han usado anuncios para astroturfear las redes sociales y de internet rusas con mensajes llamando a aislar económicamente a Moscú y “detener la guerra”.
Esta labor está dirigida por Bezlepkin Evgeny Vitalievich, quien utiliza el alias de Evgeny Korolev, junto con Pavel Antonov de la organización Targetorium. Desde su seudónimo Korolev, el guerrero de la información ucraniano redactó un post en su página de Facebook (ahora privado) jactándose de que los anuncios de su empresa en Facebook alcanzaron 30 millones de visitas en tres días.
Al mismo tiempo, Facebook ha bloqueado las iniciativas de los canales de medios estatales rusos de circular anuncios y monetizar sus contenidos. Varias cuentas falsas de medios como Russia 24 han surgido, enterrando las verdaderas cuentas bajo una serie de impostores. Facebook también ha señalado de “falsas” las declaraciones de funcionarios rusos, incluso del Ministerio de Defensa.
Esta campaña ha sido denunciada de llevarse a cabo bajo la recomendación de StopFake, un medio autodescrito como de “verificación de hechos” que está financiado por la Fundación Nacional para la Democracia (NED, sus siglas en inglés), el Atlantic Council, los ministerios de exteriores checo y del Reino Unido y la International Renaissance Foundation, que está financiada por la Fundación Open Society del milmillonario George Soros.
StopFake fue contratada por Facebook en marzo de 2020 para “contener el flujo de la propaganda rusa” pero fue fundada para dar empleo a múltiples personajes estrechamente vinculados con los violentos neonazis. El periodista que co-escribió su exposición recibió amenazas de muerte y finalmente huyó de Ucrania.
Estas revelaciones aparentemente no han impedido que Facebook deje de depender de la guía censora de la organización.
Mientras tanto, hackers rusos localizaron un documento público de Google (desde entonces privado, subido aquí) detallando la operación propagandística, que ha sido distribuida en canales de “granjas creativas” de Telegram.
“Aquí puedes encontrar enlaces a medios ucranianos que necesitan promoción, cuentas de bot con inicios de sesión y contraseñas desde las que enviaban a los usuarios mensaje anti-guerra y mensajes con falsificaciones sobre el Ministerio de Defensa, tesis e instrucciones específicas sobre cuáles posts y audiencias bordar”, se lee en la investigación.
Otra campaña está manejada por Nataliya Popovych, la fundadora de la agencia de relaciones públicas One Philosophy, en Kiev. El perfil de Popovych en LinkedIn muestra que ella ha trabajado con el Departamento de Estado de Estados Unidos y fue asesora del expresidente Petró Poroshenko. También es cofundadora y miembro de la junta directiva de Centro de Crisis Mediática de Ucrania, un brazo propagandístico financiado por la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, sus siglas en inglés), la NED, la embajada estadounidense y la OTAN, entre muchos otros.
Un artículo de Campaign Asia describe a varias empresas de relaciones públicas involucradas en la labor. Entre ellos está Richard Edelman, director general de Edelman PR. Edelman también es miembro del Consejo de Dirección del Atlantic Council y del Foro Económico Mundial (o Foro de Davos).
“La geopolítica se ha convertido en la nueva prueba de confianza. Lo vimos con las denuncias de abusos a los derechos humanos en Xinjiang y la guerra entre Ucrania y Rusia no ha hecho más que reforzarla”, dijo, relacionando la campaña de propaganda estadounidense en torno a la campaña de China para la desradicalización de los musulmanes uigures.
Medios aprobados por las relaciones públicas
Un artículo en PRWeek describe a varias personalidades que participan en lo que describen como un “ejército de relaciones públicas” que está “luchando en la primera línea informativa” contra el “salvaje genocidio de ucranianos” por parte de Rusia.
“La propaganda es lo mismo que las armas letales reales”, declara Marta Dzhumaha, gestora de relaciones públicas en la compañía sanitaria BetterMe.
Julia Petryk, jefa de relaciones públicas de MacPaw, ofrece una lista de medios aprobados, escrita por su colega Tetiana Bronistka, una exempleada de la Fiscalía General de Ucrania. La lista incluye fuentes de lengua rusa e inglesa, así como canales de Telegram. Sin embargo, estas “fuentes verificadas que cubren objetivamente lo que sucede en Ucrania” son todo menos independientes. La mayoría de ellas están conectadas al gobierno de Estados Unidos, a gobiernos europeos y a fundaciones milmillonarias.
Otra campaña está manejada por Nataliya Popovych, la fundadora de la agencia de relaciones públicas One Philosophy, en Kiev. El perfil de Popovych en LinkedIn muestra que ella ha trabajado con el Departamento de Estado de Estados Unidos y fue asesora del expresidente Petró Poroshenko. También es cofundadora y miembro de la junta directiva de Centro de Crisis Mediática de Ucrania, un brazo propagandístico financiado por la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, sus siglas en inglés), la NED, la embajada estadounidense y la OTAN, entre muchos otros.
Un artículo de Campaign Asia describe a varias empresas de relaciones públicas involucradas en la labor. Entre ellos está Richard Edelman, director general de Edelman PR. Edelman también es miembro del Consejo de Dirección del Atlantic Council y del Foro Económico Mundial (o Foro de Davos).
“La geopolítica se ha convertido en la nueva prueba de confianza. Lo vimos con las denuncias de abusos a los derechos humanos en Xinjiang y la guerra entre Ucrania y Rusia no ha hecho más que reforzarla”, dijo, relacionando la campaña de propaganda estadounidense en torno a la campaña de China para la desradicalización de los musulmanes uigures.
Medios aprobados por las relaciones públicas
Un artículo en PRWeek describe a varias personalidades que participan en lo que describen como un “ejército de relaciones públicas” que está “luchando en la primera línea informativa” contra el “salvaje genocidio de ucranianos” por parte de Rusia.
“La propaganda es lo mismo que las armas letales reales”, declara Marta Dzhumaha, gestora de relaciones públicas en la compañía sanitaria BetterMe.
Julia Petryk, jefa de relaciones públicas de MacPaw, ofrece una lista de medios aprobados, escrita por su colega Tetiana Bronistka, una exempleada de la Fiscalía General de Ucrania. La lista incluye fuentes de lengua rusa e inglesa, así como canales de Telegram. Sin embargo, estas “fuentes verificadas que cubren objetivamente lo que sucede en Ucrania” son todo menos independientes. La mayoría de ellas están conectadas al gobierno de Estados Unidos, a gobiernos europeos y a fundaciones milmillonarias.
Ella también enumera varios sitios web de lengua rusa:
Novaya Gazeta: ligado a y según informes financiado por la NED.
Meduza: financiado por Letonia, la Fundación OAK, la Fundación Open Society, el magnate petrolero Mikhail Khodorovsky y Suecia.
Dozhd: la fundación SREDA, la Comisión Europea.
Holod Media: filial de Meduza y alabada en PBS y CNN como “medio independente”.
Formuló que Leningrado debió haberse entregado a los nazis en la Segunda Guerra Mundial y se ha quejado de que son llamados “quinta columnas” por haber sido financiados por potencias occidentales.
BBC Rusia: medio del gobierno británico.
Current Time TV: creado por el medio de propaganda fundado por la CIA Radio Free Europe/Radio Liberty en colaboración con Voice of America.
Censor: financiado por su editor en jefe Yuri Butusov, exasesor del Ministerio de Defensa de Ucrania.
200RF: un sitio web del Ministerio de Relaciones Exteriores ucraniano que afirma publicar fotos y documentos difundidos de soldados rusos capturados y muertos en acción.
Entre los canales de Telegram incluyó:
Radio Svoboda: órgano de propaganda fundado por la CIA Radio Free Europe/Radio Liberty.
Espresso TV: en gran medida poseído por la esposa del exmiembro del parlamento ucraniano Mykola Knyazhytsky.
Censor.net: anteriormente el más grande sitio mediático en Ucrania, cuya divisa es “Derribar a Rusia” y cuyo dueño dirige un “desfile de trolls internacionales”.
Operaciones de inteligencia
Mientras que las empresas de relaciones públicas distribuyen contenido, fachadas (cutouts) de la CIA y fundaciones milmillonarias dirigen los medios de comunicación de los que derivan. En el centro de esta operación está un proyecto llamado Intercambio de Noticias en Lengua Rusa (Russian Language News Exchange) que fue un producto de una red de medios de comunicación de oposición fundados en 2016 que operan en los países postsoviéticos, como reveló una investigación de la agencia mediática rusa RIA FAN.
En julio de 2021, un grupo de periodistas volaron a Varsovia para entrenamiento mediático luego de estar eximidos de las restricciones relaciones al coronavirus y las órdenes de cuarentena por las principales autoridades médicas de Polonia.
Entre los seis periodistas estaban Andrey Lipsky, editor en jefe adjunto de Novaya Gazeta, y Yuliia Fediv, directora ejecutiva de Hromadske TV Media, uno de las cadenas más vistas en Ucrania.
Los informes financieros de Hromadske muestran que está financiado por numerosos gobiernos y fundaciones, incluidos la embajada estadounidense en Ucrania, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Dinamarca, la Agencia de Cooperación y de Desarrollo Internacional sueca, el Fondo Europeo por la Democracia y Free Press Unlimited. El multimillonario de Silicon Valley Pierre Omidary también estuvo involucrado en la creación del medio.
Hromadske recientemente presentó a un comentarista exigiendo el genocidio de rusos étnicos en el Dombás, diciendo que estaba poblado por 1.5 millones de personas “superfluas” que “deben ser exterminadas”.
El entrenamiento, desarrollado a puertas cerradas del 19 al 21 de julio, se tituló “Red Mediática 2021+” y estaba estrechamente vinculado a Mediaset, también conocido como Russian Language News Exchange, una red fundada en 2015. El sitio web de Russian Language News Exchange es mísero, con poca información disponible de sus actividades, aparentemente realizadas en privado desde la publicación de la investigación de RIA FAN.
Mientras afirma ser independiente, Russian Language News Exchange es un proyecto de Free Press Unlimited, financiado por el gobierno holandés y la Comisión Europea.
Actualmente incluye 14 medios de comunicación que actúan como “nodos”, republicándose los artículos de cada uno en sus plataformas en varios países.
El video introductorio del sitio web está presentado por Maxim Eristavi, un exreportero de Radio Free Europe y fundador de Hromadske. Hoy dirige el Programa de Liderazgo Millennium en el tanque de pensamiento de la OTAN y sostenido por la industria armamentista, Atlantic Council.
Desde su creación, Mediaset se ha coordinado entre medios en Azerbaiyán, Georgia, Kazajistán, Kirguistán, Letonia, Moldavia, Rusia y Ucrania. En marzo de 2021, Mediaset se expandió con el Proyecto Colab Medios, creado a través del programa Medios Viables para Sociedades Empoderadas (VIMES, sus siglas en inglés) de Free Press Unlimited. Este programa creó un programa de formación para periodistas y procuró artículos del medio salvadoreño El Faro publicados en Euroradio (Bielorrusia), Coda (Georgia) y Ziarul de Garda (Moldavia).
El 4 de marzo, varios días luego de que Rusia lanzara su ofensiva militar, un nuevo proyecto llamado Medios Vitales de Ucrania (Media Lifeline Ukraine) fue creado.
El día siguiente, Free Press Unlimited celebró una conferencia de emergencia por Ucrania presentada por los cofundadores Maxim Eristavi y Nataliya Gumenyuk. En la reunión se pidió recaudar 2 millones de euros para el proyecto. “Solo con un continuado apoyo externo, las entidades de los medios locales podrán seguir haciendo su trabajo”, plantea su página introductoria.
Días después, Free Press Unlimited anunció una asociación para apoyar un nuevo proyecto conjunto de Reporteros Sin Fronteras y su socio ucraniano, el Instituto de Información Masiva (Institute for Mass Information), llamado Centro para la Libertad de Prensa Leópolis (The Lviv Press Freedom Center). El Institute for Mass Information está encabezado por el responsable de comunicaciones de la USAID Oksana Romaniuk y financiado por la USAID y el gobierno del Reino Unido.
Lobistas de Washington DC distraen la atención
Mientras que las empresas de relaciones públicas y las operación de propaganda relacionadas a la inteligencia apuntan a la sociedad, los lobistas de Washington DC están agitando en el Congreso para prolongar la guerra en Ucrania.
Daniel Vajdich, un agente extranjero registrado y lobista para la Federación Ucraniana de Empresarios de la Industria del Petróleo y el Gas, la más grande en Ucrania, está trabajando en nombre de Volodímir Zelenski para cabildear ante los miembros del Congreso la aprobación del envío de más armas a Ucrania. Ahora es el director de Yorktown Solutions, anteriormente asesoró las campañas de Ted Cruz y Scott Walker y es miembro senior no residente del Atlantic Council.
“Stingers, Javelins [misiles de factura estadounidense], y resolvemos el tema de los aviones de combate”, dijo a Politico, alegando que Rusia está tratando de llevar a cabo un “genocidio” y “despoblar ciertas áreas de Ucrania”.
Vajdich también escribió el discurso de Zelenski del 16 de marzo ante el Congreso estadounidense, en donde citó la expresión de Martin Luther King Jr. “Tengo un sueño” (‘I Have a Dream’) para pedir una zona de exclusión aérea sobre Ucrania.
El discurso del 23 de febrero del Representante Permanente ucraniano ante las Naciones Unidas, Sergiy Kyslytsya, en la Asamblea General de la ONU fue escrito por el director general de la empresa de cabildeo de la capital SKDKnickerbocker, Stephen Krupin, un importante exredactor de discursos del presidente Barack Obama que trabajó mucho en la campaña de Biden de 2020.
El más destacado entre los lobistas registrados que promueven los intereses gubernamentales y empresariales ucranianos es Andrew Mac, quien también contribuyó a escribir el discurso de Zelenski en el Congreso. Mac se registró como lobista de Zelenski en 2019 y dirige la oficina en Washington DC del bufete ucraniano Asters Law.
La empresa de cabildeo Your Global Strategy, fundada por Shai Franklin, que ha estado afiliada a numerosas organizaciones sionistas, como el Congreso Mundial Judío y la Liga Antidifamación, también está usando su influencia con funcionarios locales en Estados Unidos. Franklin ha organizado reuniones entre el alcalde de Járkov, Ihor Terekhov, y alcaldes estadounidenses, como Eric Adams en Nueva York, Michelle Wu en Boston y Lori Lightfoot en Chicago. También está intentando organizar una reunión entre funcionarios estadounidenses y los alcaldes de Odessa y Kiev. Un medio de comunicación propiedad de la esposa del alcalde de Kiev relacionó recientemente a un presentador que pedía un genocidio contra los rusos, empezando por los niños.
Franklin dijo que está trabajando con la administración del presidente ucraniano Volodímir Zelenski para ayudar a organizar reuniones virtuales entre los alcaldes de Odessa y Kiev y sus contrapartes estadounidenses.
El abogado radicado en Maryland, Lukas Jan Kaczmarek, también está trabajando en nombre del Ministro de Defensa ucraniano para incrementar los cargamentos de armas estadounidenses, tratando específicamente de organizar los envíos de armas de Kel-Tec CNC Industries con sede en Cocoa, Florida, a la ciudad de Odessa, Ucrania.
El exembajador de Estados Unidos en Rusia, Michael McFaul, describió la red de profesionales de relaciones públicas y los lobistas que rodean a Zelenski. “Son personas que rodean al señor Zelenski, que son como los intermediarios e interlocutores. Llevan mucho tiempo interactuando con las élites y los medios de comunicación estadounidenses”, dijo.
McFaul y John E. Herbst, exembajador de Estados Unidos en Ucrania y director del Centro de Eurasia del Atlantic Council, actúan como asesores informales de Zelenski. McFaul declaró a Politico que habla con funcionarios del gobierno ucraniano “probablemente todos los días” y que “les ha ayudado a establecer contactos con productores de la NBC o la MSNBC”.
McFaul recientemente dijo a Rachel Maddow de MSNBC que “Hitler no asesinó a personas de habla alemana”, enfrentándose a acusaciones de negacionista del Holocausto.
Zelenski también sostuvo una “videollamada estratégica” con McFaul antes de hablar a los demócratas de la Cámara de Representantes.
Con un poderoso ejército ruso luchando junto a las fuerzas de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, la derrota del ejército ucraniano parece inminente a menos que Estados Unidos y la OTAN confronten directamente a las fuerzas rusas, un escenario que el presidente Biden ya ha descartado. Aun así, los lobistas persisten en su campaña de retratar al ejército ucraniano como inerme que asesta un golpe tras otro contra las hordas rusas. Al hacerlo, contribuyen a dilatar la guerra y continuar la carnicería.
Gráfico que llama al Zar Nicolás, Vladimir Lenin, Joseph Stalin y Vladimir Putin encarnaciones del mismo «Dragón Mental Moskoviano»«La Enciclopedia de las Enfermedades Incurables»: Rusia, Bielorrusia, Corea del Norte, Siria, EritreaDice: «La democracia es un arma»«I love NLAW» – Next Generation Light Anti-tank Weapon, proporcionada por los gobiernos occidentales al ejército ucraniano.
Metáfora de la isla en fuga y otros mitos (anti)cubanos. Por: José David País Santamaría
Hoy hay coros en el metaverso entonando baladas nostálgicas sobre la emigración cubana. Politizando. Se asume el asunto como un indicador del fracaso del modelo socialista; como una derrota de la sociedad de la que, se presume, la gente o escapa, o se exilia.
Me pregunto cuándo se instaló el socialismo en Haití, Honduras, El Salvador, Guatemala o México, emisores principales de almas migratorias hacia los EE.UU. ¿Cuándo llegó el socialismo al norte de África para empujar gente hacia el Mediterráneo? Y no era que se había caído el comunismo en Europa del Este? Cómo es que tanta gente pobre y desesperanzada brinca hacia las capitales occidentales, para alimentar manos de obra baratas, prostíbulos y clubes de lavado.
Hay que dejarse de tanta tontería!!!
Y dejar de andar citando a medias a Martí, un emigrante de su tiempo; un desterrado al que no pudo impedir su regreso ni un ejército imperial en fila: “salto, dicha grande”, desde un bote milagroso donde llevó el remo de proa, bajo el temporal.
Tenemos el derecho a migrar y lo ejercemos. No es correcto justificar la decisión maldiciendo al país. Sobre todo si quien decide emigrar no escapa de un conflicto potencialmente mortal; de calles inseguras copadas por bandas; de miseria extrema y hambre; de postguerra; de carencia de atención médica; de ausencia de derechos al estudio o el trabajo; y tantos etcétera.
La emigración es parte de la nación. Con valentía hay que decir que el esfuerzo de cubanos afuera, ha sido vital para sostener a miles de familias aquí, y que ese aporte a la economía de la isla es inmenso y lo seguirá siendo.
Hace falta aterrizar el “vivir mejor” que ofrece el capitalismo y no suponer que los que se van no tenían nada, sino que decidieron que no tenían suficiente. Esa decisión es muy personal y cada quién sabe lo suyo.
Se ajusta muy bien a los narradores de la reinstauración capitalista el mito de la isla en fuga. Si todos se van: ¿quién hizo las vacunas? ¿Quién la puso en el brazo de mi hijo de cinco años? ¿Quién los cuida cuando estoy en el trabajo? ¿Quiénes trabajan junto a nosotros? ¿Quién sembró lo que nos comemos? ¿Quién maneja la guagua donde nos apretamos para llegar a alguna parte, a ritmo de reggaeton? ¿Quién custodia mis calles? ¿Quién se empeña en resistir la agresión? Esa que existe para eso; para que la gente pierda la esperanza, se canse, se moleste, se quiebre.
Todos extrañamos a alguien. Y ese vacío no se llena con nada. Pero cuando vayamos a buscar culpables, pensemos que si mañana se acabaran los bloqueos y las agresiones, miles de cubanos regresarían a una patria más próspera, que un día no pudo satisfacer sus aspiraciones materiales o del espíritu. Que los jóvenes se vayan es parte de la guerra contra la isla. Por eso se cerró el deshielo, y todo se volvió a congelar. La gente cogió otro aire, dejó de lanzarse al mar y muchas cosas buenas florecieron. ¿Acaso fue el Gobierno cubano el que cerró esa puerta en la cara?
Que se reconozca a los verdaderos culpables; que asumamos con valentía y autocrítica el por ciento que nos toque de la culpa; que se acaben bloqueos y divisiones; que las familias se junten y no se quiebren en viajes arriesgados, en busca de tierras prometidas.
De lujo el comentario de #CristinaEscobar en el NTV, desnudando la verdad en torno a la emigración irregular de cubanos y mostrando en todas sus aristas, al causante de tal fenómeno: el Gobierno de EEUU, q la promueve con sus acciones.
Creadores de vacunas cubanas anticovid reciben Medalla para Inventores, que otorga la OMPI (+ Fotos).Por: Lisandra Fariñas Acosta, Ismael Francisco
En la ceremonia se reconocen las innovaciones de Soberana 01 y la Soberana 02, al igual que Abdala y Mambisa. Foto: Ismael Francisco/Cubadebate.
En la ceremonia se reconocen las innovaciones de Soberana 01 y la Soberana 02, al igual que Abdala y Mambisa. Foto: Ismael Francisco/Cubadebate.
Con la presencia del primer secretario del Partido Comunista de Cuba y presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y Daren Tang, director general de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), se celebró este lunes en La Habana la ceremonia en la cual científicos creadores de las vacunas anticovid-19 cubanas recibieron la Medalla para Inventores, que otorga ese organismo internacional.
Ucrania: El Ministerio de la Verdad (+ Video)Por: José Manzaneda
En torno a la guerra en Ucrania, los medios y gobiernos occidentales nos prohíben leer otro libro que el escrito por la OTAN.
Censura absoluta: 1984
Los medios rusos que, durante años, han sido espacio para analistas internacionales críticos (1) (2), han sido prohibidos por EEUU, la Unión Europea (3), Reino Unido (4) y otros aliados. Su señal abierta, sus canales YouTube (5) y todas sus redes sociales. Sin decisión judicial alguna.
Las vacunas podrían estar salvando al mundo de la COVID-19, pero no es así. Casi en todas partes, el acceso a la vacuna o la vacilación sobre la vacuna son nuestros talones de Aquiles.
Hace muchos años que se hacen invisibles hechos y poblaciones, y que millones de personas en todas partes tienen en mente un mundo que no es el real, sino el recorte que les han preparado, la única ventana por la miran las cosas.
La realidad contiene una diversidad que al poder le repele, porque seguimos actuando con la selección de las especies como marco de sentido común, incluso inconsciente. El poder llega hasta ahí de profundo, y cuenta con herramientas para hacer laparoscopías mentales y emocionales cada día. Pero el conflicto desatado en Ucrania sobregiró todo: lo que estamos viendo es de un nivel de hipocresía y de autoritarismo nunca visto.
Una táctica vieja como el colonialismo es la de construir a un enemigo; pero va acompañada por la de hacer invisibles las propias salvajadas. Lo que se oculta es a veces lo que no tiene importancia en los parámetros del pensamiento dominante: el aparato de comunicación occidental –y localizo esta perspectiva desde mi localización carnal y política de latinoamericana– se enloqueció a grados escalofriantes.
Muchos europeos aceptan como un acto de libertad que nadie pueda acceder a la información de diferentes perspectivas y fuentes en sus canales de noticias. El solo hecho de que esto no sea motivo de repudio sino contado y entendido como “debilitar al enemigo”, mete la guerra en las casas: lo que era una decisión doméstica ahora es una restricción estatal. ¿No hay opinión pública crítica de la posición de la OTAN? Claro que sí. Pero es invisible. Si no estuviéramos un poco dopados, nos habría llamado la atención que ningún canal pasara el discurso de Malenchon, en Francia, o el discurso de Claire Daly, la eurodiputada irlandesa que pidió a los gritos que paren con la rusofobia y se dediquen a buscar el regreso a la diplomacia. El argentino también es un aparato comunicacional que sirve a la OTAN. La misma que nos hizo la guerra en Malvinas.
Desde hace décadas, los padecimientos de pueblos enteros, de países cuyas tradiciones se extienden al origen de la humanidad, han sido ocultados. Vivimos bajo la égida informativa de la OTAN, y desde luego no nos iban a mostrar ni a dejar escuchar en los últimos años los lamentos de millones de condenados de la tierra, cuyos ricos territorios fueron destruidos por Estados Unidos, que lucha hoy por conservar una hegemonía que ya no tiene. Esta obsesión en aceptar que la multipolaridad es un hecho, y que tiene que dejar que el mundo se reacomode, la arrastra a la extrema derecha.
La reaparición de ese extremismo fanático devino en otra herramienta útil. Antes fogoneaban y financiaban grupos terroristas bizarros. Ahora, couchean posibles presidentes de los países que les convienen, y los entronan para hacer sus operaciones. Nadie con dos dedos de frente puede dudar de que Zelensky es un golpista dispuesto a convertir Ucrania en una Meca neonazi.
Ver la escena de esta guerra con Rusia como nación provocada en sus narices, cuando todavía estaban en marcha negociaciones con el atroz peso de las masacres del Dombass, no significa en absoluto que uno acuerde con las políticas internas de Putin ni que crea que desde Rusia llega información confiable, claro. Pero, ¿cómo tener pensamiento crítico cuando se obstruye por la fuerza la versión de una de las partes? Uno de los reproches más contundentes que se le hacen, y al que aun teniendo otra perspectiva de este conflicto quien firma esto comparte, es su intolerancia en relación con el género y su poca tolerancia a la oposición.
El pensamiento crítico no puede acomodarse a un lugar fijo. Putin no es aquí evaluado por sus políticas internas, sino por la nueva geopolítica que Estados Unidos quiere abortar como sea. Y siempre le han venido bien los fanatismos, aunque empiece sus propias y múltiples invasiones con la excusa de “la libertad”. Los militares latinoamericanos entrenados por ellos que durante décadas y que hasta hoy luchan contra “el enemigo interno” eran fanáticos capaces de buscar las formas más perversas de eliminación física del otro. Sabemos poco sobre los abusos de Rusia, que seguramente existen, pero hemos probado en carne propia los abusos de Estados Unidos. Su propio embajador en la Argentina, posando con Macri el jueves, es un abuso diplomático.
Putin habla de la necesidad de la “desnazificación” de Ucrania y el poder de Occidente lo hacen sonar “autoritario”, “dictador”. Y claro que hay que desnazificar el mundo, aunque en la ONU, en 2021, los únicos países que se opusieron a una resolución que iba en ese sentido hayan sido Estados Unidos y Ucrania.
Esto es lo más peligroso: los neoliberales han arrastrado a los liberales y hasta a muchas izquierdas a ese tipo de tolerancia absurda que padecemos también en nuestra política interna. El librepensador se siente menos librepensador ahora si alguien afirma que los negacionismos, que incuban los totalitarismos, deben ser erradicados legalmente. Esa malformación de la tolerancia es lo que a muchos les hace pasar por alto las barbaridades que han hecho hace más de una década los nazis ucranianos.
Con el nazismo no se discute. Con el fascismo no se negocia. A los totalitarismos la democracia no puede tolerarlos, porque se les abre el camino al poder nuevamente, y lo primero que repetirán será su eterno modus operandi de solución final.
La vieja Europa sigue siendo atrozmente eurocéntrica, y este conflicto le hace decir cosas que las estaturas de los viejos líderes europeos no hubieran soportado. Ya no están ahí los que tuvieron padres partisanos o experiencia vital del nazismo. Los corresponsales de grandes medios o agencias agregan a su estupor por la violencia cosas como que “este un conflicto diferente a otros”, porque han visto víctimas “rubias y de ojos celestes, que podrían vivir en la otra cuadra de tu casa”.
Esa declaración está colocada sobre la conmiseración pero sólo del que se le parece racialmente. Eso es una semilla nazi. Es una hilacha de racismo intolerable. Siguen teniendo aliento de colonizadores. Después no nos preguntemos de dónde salen los neonazis. Después no nos asombremos cuando nuevas ultraderechas lleguen al poder y desde los propios Estados se pretenda eliminar también la noción de género y volver a hablar de sexo: lo que se le critica a Putin. Eso, entre otras grandes calamidades que pueden ocurrir.
Muchos de los que creemos que Rusia tiene tanto derecho a su seguridad nacional como cualquier otro país del mundo, no votaríamos a un candidato como Putin. Lo que nos revuelve el estómago es que con estas patrañas Estados Unidos capitalice a su favor esa mirada, y se atente contra el mundo multipolar que sí queremos, que sí apoyamos, que sí queremos preservar porque al menos hasta ahora, ni Rusia ni China nos deben nada. Los que instalaron las doctrinas de “seguridad nacional” –y la usaron para el exterminio de argentinos– fueron los estadounidenses.
Ahora creen que el mundo es para ellos. Y ésa es la pesadilla, porque esta vez ya no serán las fuerzas armadas ni los jueces los que intentarán hacerse del poder, sino los fanáticos que cultivan in vitro y que aplastarán todas las diferencias. Los discursos del odio, ¿para qué los usan? Para quemar a las brujas de Salem. (Tomado de Página12)
Conversando con los chinos sobre ciencia, desarrollo y socialismo. Por Agustín Lage
La semana pasada ocurrió una conferencia virtual entre un equipo del Partido Comunista de China y uno del Partido Comunista de Cuba, con una sesión titulada: “Seminario Teórico entre el PCC y el PCCh: Las responsabilidades de la ciencia en el camino al socialismo”.
Antes de ser elegido presidente de los Estados Unidos Dwight D. Eisenhower fue el primer Comandante de la OTAN. En Febrero de 1951, pocos meses después de asumir sus funciones escribió textualmente lo siguiente: “Si en 10 años todas las tropas americanas estacionadas en Europa con el propósito de asegurar la defensa nacional no han regresado a Estados Unidos, entonces este proyecto, la OTAN, habrá fracasado.” Las tropas no regresaron sino que su presencia en Europa no cesó de acrecentarse. No sólo eso sino que una vez desintegrada la Unión Soviética y contrariando las solemnes y huecas promesas de los principales líderes de los gobiernos occidentales (Clinton, Bush, Obama, Helmut Kohl en Alemania, Tony Blair en el Reino Unido, etcétera) en el sentido de que “la OTAN no se movería una pulgada hacia el Este” trasladaron pertrechos y efectivos hasta las fronteras mismas de Rusia. ¡Cómo! ¿No era que el enemigo era la Unión Soviética y el comunismo? No. El enemigo era, y es, Rusia, una país demasiado extenso y poderoso cuya sólo presencia, sea bajo un régimen comunista o capitalista, es un obstáculo a los planes de dominación mundial (Chomski dixit ) de Estados Unidos.
Preocupa la estabilidad mental de una Maria Elvira Salazar que se ha convertido en un estorbo para muchos, vea esta noche las pruebas. La realidad aplasta las campañas de un supuesto éxodo masivo desde Cuba. Acusa nuevamente Otaola a Manuel Milanés de trabajar para el Guerrero.